La esclerosis múltiple, también conocida como la “enfermedad de las mil caras” es una patología compleja que nace a raíz del propio sistema inmunológico y para la que aún no existe una cura definitiva.
Generalmente esta enfermedad empieza a aparecer entre los 20 y 40 años, sin embargo, la aparición de la misma en personas de la tercera edad requiere una serie de cuidados especiales, para los cuales te vamos a dar una serie de consejos.
Primeros síntomas de la esclerosis múltiple
Los síntomas de esta enfermedad son impredecibles y varían dependiendo de la intensidad. Mientras que algunas personas comienzan sintiendo fatiga y entumecimiento, puede haber otras que sufran síntomas más graves como pérdida de vista, parálisis y disminución de las funciones cerebrales. Por eso mismo, es recomendable que los pacientes que empiezan a sufrir esta enfermedad cuenten con el apoyo diario de algún familiar o una cuidadora interna profesional.
Entre los signos más frecuentes podemos destacar:
- Problemas en la vista: Es de los más comunes, la inflamación afecta el nervio óptico y altera la visión central.
- Cosquilleo y entumecimiento: Al igual que la pérdida de visión, estos dos síntomas son de los más comunes, el entumecimiento se siente en el rostro, los brazos, las piernas y los dedos.
- Dolor y espasmos: Puedes experimentar rigidez en los músculos o en las articulaciones, así como dolorosos movimientos espasmódicos e incontrolables de las extremidades. Suele afectar las piernas, pero también es común el dolor de espalda.
- Debilidad o fatiga: La fatiga crónica se presenta cuando se deterioran los nervios de la médula espinal. Normalmente, la fatiga aparece de repente y dura semanas hasta presentar mejorías. Al principio, la debilidad se nota más en las piernas.
- Problemas de equilibrio o mareo: Los mareos y los problemas de coordinación y equilibrio pueden disminuir la movilidad de una persona con EM. Tu médico puede referirse a ellos como dificultades para caminar y lo notarás generalmente cuando quieras ponerte de pie.
- Problemas de vejiga: Este síntoma se da hasta en el 60% de las personas con EM de todo el mundo, y se registran índices más altos en los países más industrializados. Esto incluye la micción frecuente, las ganas constantes de orinar y la incontinencia.
- Disfunción sexual: La excitación sexual puede llegar a ser un problema para las personas que padecen esta enfermedad, puesto que se origina en el sistema nervioso central, donde ataca la patología.
- Problemas cognitivos: Alrededor de la mitad de las personas con esclerosis múltiple presentan problemas cognitivos tales como problemas de memoria, capacidad de atención reducida, problemas lingüísticos y dificultad para organizarse.
Tips para cuidar a una persona con esclerosis múltiple
Además de darte una serie de consejos generales, desde Agencia Servita queremos tenderte una mano con unos tips más específicos que te ayudarán a cuidar bien de tu familiar con esclerosis múltiple:
- Lo primero que debes hacer es consultar con su médico cuál es el calmante adecuado en caso de que sienta dolor y a qué horas debe tomarlos.
- El tabaco obviamente es completamente desaconsejable, aumenta el temblor y puede producir trastornos en la visión.
- Es recomendable intercalar periodos de reposo siempre que se realice algún tipo de actividad física. Disminuyendo la temperatura ambiental, abriendo las ventanas o sustituyendo las comidas o bebidas calientes por frías, disminuye la sensación de fatiga.
- Es conveniente realizar gimnasia, ya sea en casa o acudiendo a rehabilitación.
- Adaptar la vivienda con puertas anchas por si pudiera llegar a necesitar silla de ruedas, evitar desniveles, que la altura de la cama no le suponga ningún tipo de dificultad cuando vaya a acostarse, etc.
- El paciente debe utilizar prendas cómodas y anchas, evitar el uso de botones (mejor cremalleras gruesas y velcro), utilizar mangos especiales para ponerse los calcetines y el calzado…
Si sigues nuestros consejos, seguro que además de ayudar a tu ser querido con su rutina diaria, le harás sentir mucho mejor consigo mismo.