El envejecimiento poco a poco hace estragos y nos impide valernos por nosotros mismos. Llega un momento en los que se limitan nuestras capacidades y la autonomía personal se hace más difícil. En estos momentos en los que los ancianos no pueden vivir en soledad, pero tampoco quieren abandonar su casa.
En estos momentos los familiares se enfrentan a un gran dilema: ¿Qué hacer con un anciano que no puede vivir solo y no quiere salir de su casa?. Vamos a ver las posibles soluciones a esta situación sin perder de vista el bienestar del mayor en su vida y la tranquilidad de sus familiares.
Cuidado de personas mayores en el hogar
Una de las posibles soluciones es contratar un servicio de cuidado de ancianos a domicilio. Este cuidador ayuda en las tareas diarias en el hogar, el control de su medicación y de su estado de salud y un acompañamiento afectivo fundamental para un mayor que vive solo en su casa.
La situación de una persona de edad avanzada al envejecer hace necesaria una solución para su cuidado y asistencia en su casa si es el caso que no quiera desplazarse a una residencia.
Este tipo de personal encargado del cuidado de personas mayores puede encargarse de:
La asistencia personal del mayor
Proporcionando ayuda en las actividades diarias como vestirse, bañarse, asearse o cualquier tipo de asistencia básica en su casa.
Control y administración de alimentos
Para garantizar que el anciano tome su medicación en el horario que debe hacerlo según su prescripción médica, incluida la organización de los medicamentos.
Preparación de las comidas
El cuidador de personas mayores puede ocuparse también de elaborar los menús semanales, hacer la compra necesaria y prepara la comida. Siempre teniendo en cuenta las necesidades alimentarias del mayor.
Acompañamiento social y apoyo emocional
En el caso de un cuidador en domicilio de personas mayores de avanzada edad pueden encargarse de hacer compañía, escucharles y hablar con ellos. En definitiva, cubrir sus necesidades de compañía que tan importante es también para cuidar su bienestar emocional.
El apoyo emocional, la comprensión y la paciencia en ciertos momentos es fundamental para reducir la ansiedad del mayor y de su propia familia.
Gestión y adaptación del hogar
Para poder cuidar a personas mayores en su hogar hay que adaptar su vivienda para esta situación. Sobre todo en el caso de las personas sin cónyuge, los posibles obstáculos en el domicilio pueden suponer un peligro de movilidad y de organización.
Las personas de edad avanzada deben vivir en una casa libre de obstáculos y con todo lo que puedan necesitar en su vida diaria al alcance de su mano. Esto mejora su seguridad y el riesgo de accidentes debido a su situación de merma cognitiva.
Control de la salud
Por lo general una persona mayor necesita de cuidados sanitarios. En estos casos hay que acompañarles a citas con los médicos, por ejemplo. Acompañarles e interpretar los diagnósticos y cualquier consejo que el médico pueda dar.
Es una tarea esencial para el manejo de los medicamentos y reducir la vulnerabilidad del mayor. Un cuidador profesional está preparado para comunicarse adecuadamente con la familia o los médicos si surge algún riesgo en su salud o la situación empeora en cualquier momento.
La colaboración con los médicos y profesionales de la salud en general es fundamental para asegurar una atención integral y ajustada a las necesidades específicas del anciano.
Ejercicio físico del mayor
Un cuidador ayuda al mayor para realizar ejercicios físicos suaves y adaptados a las capacidades del anciano. Aunque su movilidad sea limitada puede ayudar a promover su movilidad y mejorar su salud.
Ayudar en el transporte del mayor
En el caso de que las personas mayores deban desplazarse en algún momento como para la asistencia a citas médicas, el cuidador puede ayudar a trasladarlo con garantías y evitar riesgos de seguridad en el transporte.
Cuidado familiar para el mayor
Otra forma de cuidar al mayor es la asistencia de un familiar en su domicilio. Si hay familiares disponibles para ello puede trasladarse a la casa del mayor y encargarse de sus labores cotidianas.
Es una opción más económica, pero puede ser inviable en ciertas situaciones. Los ancianos que no pueden vivir solos necesitan un cuidado y atención 24/7 con lo que puede ser una situación estresante para un único familiar que pueden encargarse del cuidado.
Podrás desarrollarse durante un determinado tiempo, pero el cansancio aparecerá si un único familiar se encarga del cuidado de la persona mayor en casa.
Los compromisos personales, laborales o de recreo de los familiares terminarán por entrar en conflicto con la adecuada atención al anciano. Las necesidades de cuidados del mayor pueden ir en aumento cuando envejezca y la situación puede hacerse insoportable con el tiempo.
Acudir a servicios sociales y comunitarios
Otra manera de conseguir un servicio de asistencia en el domicilio de las personas mayores es acudir a los servicios sociales y comunitarios cerca de su casa.
Ellos pueden ayudar a conseguir una persona que cuide del mayor en el domicilio en función de las ayudas públicas disponibles. En el caso de que no puedan proporcionarlo con inmediatez pueden dar consejos para reducir la vulnerabilidad del mayor o para solicitar contraprestaciones económicas para el cuidado del mayor.
Ellos tienen por misión gestionar y facilitar este tipo de ayudas.
